La chaqueta Ginger de mis amores por fin ha conseguido su hueco en el armario gracias a que ya es Otoño. Es una pieza preciosa, simple pero llena de detalles, y para mi de las más bonitas que he diseñado. Misma lana que sus hermanas pequeñas pero mucho más grande a todos los efectos. Ya sabéis que con Ginger todo sabe mucho mejor!